El tiempo del plástico tradicional se acaba. El proyecto CIRC-PACK ha desarrollado un prototipo de envase de bioplástico hecho con un material orgánico reciclado y compostable. Pero qué opinan los consumidores, ¿les gusta?, ¿lo comprarían aunque costara algo más? Desde OCU nos contestan a todas estas preguntas.
Adiós al plástico
El plástico se ha ido acumulando en la naturaleza creando serios problemas medioambientales. Si tenemos en cuenta que el plástico es un material muy resistente a la degradación y que cada eurpeo tira de media 14 kilos de este material a la basura es evidente que hay que encontrar una solución.
Y por esto, aparece CIRC-PACK. Un proyecto subvencionado por la Unión Europea que agrupa a 22 intervinientes en toda la cadena de valor del plástico con el objetivo de buscar, producir y evaluar nuevos envases más sostenibles, tanto desde el punto de vista medioambiental como de sus implicaciones económicas y sociales.
Bioplásticos, origen y características
Este nuevo prototipo de envase está elaborado a partir de, entre otras cosas, celulosa de pañales, compresas y abosrbentes que, mediante diferentes procesos de separación y fermentación y en combinación con aditivos igualmente renovables, dan lugar a los bioplásticos.
Los consumidores aprueban los bioenvases
¿Qué dicen los usuarios de este nuevo material? De nada serviría desarrollar un nuevo producto si los consumidores que son quienes van a comprarlos y usarlos, no lo hicieran.
Por tanto, en OCU se encargaron de realizar un test de envase, un estudio de mercado con consumidores que in situ probaban y daban su opinión sobre los bioenvases sin saber que estaban hechos con material orgánico y además los comparaban con los envases de plástico tradicional. En este video puedes ver cómo se desarrolló la jornada en Madrid:
Test de envases: 6 ciudades, 180 personas, 7 productos
OCU realizó esta prueba en 6 ciudades Europeas diferentes: Madrid, Lisboa, Milán, Bruselas, Rijeka y Kartal y en cada una de ellas citaron a 30 personas representativas por género y edad, que habitualmente se encargan de la compra en sus hogares. Les entrevistaron de manera individual siguiendo un cuestionario previamente definido en torno a 7 productos.
Una bandeja para productos frescos, una cápsula para café, un bote de champú, una bolsa de un solo uso, una bolsa reutilizable, una caja de detergente y un paquete de comrpesas.
De uno en uno fueron mostrando los dos envases, el tradicional y el de bioplástico, primero de manera individual y luego en conjunto sin decirles cuál era cuál para que valoraran los siguientes aspectos:
- Aspecto visual.
- Resistencia.
- Capacidad para comprimir.
- Comodidad de manejo.
- Contenedor al que desechar.
En algunos envases se preguntó por atributos específicos, por ejemplo en el caso de las bolsas si se abren fácilmente o si desprenden un buen olor.
Demostrado: Los consumidores prefieren los bioenvases
Después de recoger los resultados, fueron analizados y se concluyó que mayoritariamente los consumidores prefieren los bioenvases en casi todos los aspectos o, al menos, tendrían la misma aceptación que los envases actuales.
Además tres cuartas partes compraría los bioenvases aunque costaran hasta un 20% más, pero el porcentaje baja si se proponen precios más altos.
Desde OCU nos destacan algunos de los resultados:
- Bandeja para productos frescos. Los usuarios destacan que son más fáciles de comprimir al tirarlas, pero prefieren la bandeja tradicional por su aspecto y resistencia.
- Cápsulas de café. Las de bioplástico fueron favoritas en resistencia, estética y facilidad de uso. El 89% de los usuarios las compraría y hasta un 22% sin importarles el precio.
- Bote de champú. A primera vista, el bote tradicional gana en su aspecto visual, pero en resistencia empata con el bioplástico. La mayoría de los usuarios pagaría algo más por el nuevo envase.
- Bolsas de un solo uso. La nueva bolsa fue comparada con una de plástico convencional y otra de plástico reciclado. La de bioplástico fue preferida en todos los aspectos excepto en resistencia. Incluso el 90% pagaría más por ella.
- Bolsas reutilizables. El modelo de bioplástico fue la favorita en todos los aspectos frente a las de plástico convencional o reciclado. En Espaá el 97% elegiría la de bioplástico y un 14% incluso si costara un 50% más.
- Envases de detergente. Eran cajas de cartón recubiertas interiormente de plástico en el caso convencional y solo de cartón en el nuevo. Para la mayoría de los usuarios eran iguales, pero destacaron la mayor facilidad de aprtura del bioenvase. Un 17% de ellos no pagaría más por el nuevo producto.
- Paquete de compresas. El nuevo envase está algo mejor valorado en todos los aspectos. Destacaron la mejor legibilidad de su etiqueta, con menos brillo. El 98% lo comprarían a igualdad de precio y el 78% si costara hasta un 20% más caro.
En conclusión, podemos decir que los bioenvases han superado la prueba de los consumidores. Ya no hay excusas para sustitur al plástico por los bioenvases. Ahora solo queda que los fabricantes los produzcan y utilicen a gran escala.